Descendiente del «Sus mediterraneus», se extendió por el suroeste e la península ibérica, donde habitaron en las dehesas –muy abundantes en alcornoques y encinas y, consecuentemente, en bellotas–.
La mayor concentración de cerdos ibéricos la encontramos en Extremadura, Andalucía y Castilla-La Mancha, regiones dondeDeRaza cría, engorda y gestiona su producción.
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